Al final todo gira en torno al mundo de la papiroflexia y las transformaciones...
Aunque el amor frustrado se presente y se dignifique como la primera de las definiciones.
Un amor frustrado que no puede ser más cruel, que no puede ser más absurdo, que no puede ser más real, que no puede ser más frustrado, leñe.
Todo lo demás es papel que se lo lleva el viento...
Pájaros de papel que se enamoran de los de verdad, barquitos de papel que sirven de vehículos para navegar el mar y sortear cascadas, y la papiroflexia contenida que se llena de barbas, de roces y de prole.
Y allí sigue, el amor frustrado, debajo de una piedra...