Aunque haya otra razón, (más secreta, más íntima, más cercana) llevaba ya tiempo pensando en que estas pequeñas, nimias y estúpidas reflexiones sobre el mundo de la red y sus compartimentos se merecían una entrada aparte.
Los que me conocen saben de mi gusto por el orden, y me turbaba mezclar las churras políticas con las merinas más sociales.
Y es que la tontuna de internet, tan necesaria, da para mucho.
Así que di que te gusta, tonta.