martes, 30 de abril de 2013

Pájaros CXLIV






Demos de comer
aire
a cuerpo y espíritu,
para volar
tan lejos del mar,
cerca de los desayunos.

domingo, 28 de abril de 2013

Mañana empiezo CLXVIII




Madrugas en domingo y te das cuenta
que la mano vaga y sus amigos siguen estando
ahí.
A poco que uno se esfuerce,
acabará siendo más fácil
dibujar ayer.

sábado, 27 de abril de 2013

365 irrefutables razones que nos llevan a pensar que los mayas tenían razón y el fin del mundo llegó el 21/12/12 (XIX)


127) Porque Hubleck Sterpnteck, un cavernícola congelado en las cámaras frigoríficas del planeta Orión, cuyo mayor logro era tener tres ojos, cuatrol mil kilómetros de altura y una lengua con papilas olfativas, fue descongelado sin querer por el cambio climático de aquel planeta y, reconozcámoslo, porque Vriven Mozti desenchufó sin darse cuenta aquel mastodonte de aluminio.
Hubleck tenía un tamaño descomunal, como si a Urano le hubiesen salido patas al ritmo de una canción de Georgie Dann, así que tras el charco de agua, lo que se despertó con él fue un hambre atroz.
Salió a nadar por el universo aquella mañana de diciembre buscando qué echarse a la boca, y entre tanto planeta se fijó en la Tierra, que era azul como los sus sugus preferidos: los de piña.
Y se la comió, y se le hizo bola.

128) Porque tan preocupados estaban los políticos del mundo por limpiar su imagen, que hicieron una ley de trasparencia donde declararon transparentes los bosques, el glutamato, los plastidecor, la perestroika, los hijos de Marlon Brando, Eritrea y las pilas alcalinas.
De la transparencia a la invisibilidad solo hay un paso, y, como en aquella película de James Whale, el mundo se volvió loco.

129)  Porque el Mundo siempre fue perezoso, ya sea para probarse bufandas, para salir a jugar con las estrellas muertas, para rellenar sudokus mientras espera en el dentista o para ejecutar perfectamente un plié delante de un espejo.
Por eso nunca fue a clase de inglés ni aprendió chino, y puestos a hacer caso a una profecía maya, mejor "fin", que es más corto que "the end" y más fácil de escribir que 末端.

130) Porque a la petanca, lo que se dice a la petanca, nunca supieron jugar los dragones tumecas renacidos tras la regeneración cósmica que tuvo lugar en Albacete el día que Ernesto Pertíñez servía tónicas abiertas a dentadas.
Los dragones, a los que el hijo de Thor llamó "Pito" y "Cuchi" para inspirar un temor y una fiereza indómitas más allá de los confines guturales, siempre se sintieron libres para intercambiar novias, dormir en Venus o repasar en YouTube los momentos estelares de Crispín Klander.
Pero nadie tuvo a bien explicarles que la petanca no se acaba abrasando planetas para festejar una carambola, sino bebiendo ginebra con el Rey Arturo.

131) Famosos Intelectuales Neorrealistas del Ministerio Uzbeko No Duermen Opiparamente.

132) Porque Tristán Welberg manejaba tres posibles canciones para representar a Austria en el festival de Eurovisión del 2012.
Una trataba del amor de una chica ciega por su perro Segismundo, que los lleva de aventuras por Amberes a olisquear los adoquines mientras garabatean en las paredes graffitis con faltas de ortografía.
Otra era un sinsentido donde dos pentágonos y un hexaedro viajan al futuro y comprueban que solo hay pobres.
La última, votada abrumadoramente al 807141618 por el ejército chino en masa, enganchados como estaban al Canal Internacional, acabó ganando aquel concurso.
Lo que nadie imaginaba es que tales llamadas y sus respectivos costes llevaron a la quiebra al gobierno mandarín, y con ello a la economía mundial.
En una reunión de urgencia tras el show de Letterman, los mandatarios de la Tierra y alguno de Plutón decidieron poner fin a todo, no fuese a ocurrir lo que la segunda canción decía, que hay mucho hexaedro listo por la vida esperando el más mínimo empujón para campar a sus anchas.
Y eso no, que vienen curvas.

133) Porque en navidad nieva. Y la nieve es fina.
Pero la nieve quiso, en el 2012, cambiarse de sexo, que ella también tiene derecho.
Y la nieve pasó a ser el nieve.
Y el nieve ya no era fina, era fin.

viernes, 26 de abril de 2013

jueves, 25 de abril de 2013

Resaca


Pero mira como sacan
y vuelven a sacar,
los peces en el río.

Amigos en común



miércoles, 24 de abril de 2013

Me desplazo


Dedicado,
con cariño
y reposo,
a mi vagancia lenta.

martes, 23 de abril de 2013

Pájaros CXLIII






Libros
y pájaros
¡menudo cuento!

lunes, 22 de abril de 2013

sábado, 20 de abril de 2013

365 irrefutables razones que nos llevan a pensar que los mayas tenían razón y el fin del mundo llegó el 21/12/12 (XVIII)


120) Porque John Raimon Mutton Brown quería escribir una novela, dos novelas, tres novelas, ya que la vida es una novela que se nos escapó. Y a él se le escapó la novela por un pelo, que la tenía en la punta de la pluma aquella mañana de diciembre, desayunando entre Panteras Rosa y tés paquistaníes.
Pero tuvo una ocurrencia.
Se concentró y todo hizo un "para adentro" (todo, todo, los estorninos, la sartén, Mildred y los ajos) en su interior, con un sonido (algo así como "zsup") antes de que se instalase, ya para siempre, el más absoluto silencio.
Así que ya sabéis: cuando queráis escribir una novela, dos novelas, tres novelas (por favor) no os concentréis.

121) Flashback un es vida nuestra en todo porque.
O al revés.

122) El fin del mundo llegó con un poco de retraso pero llegó. Se le esperaba a las dos, para echar unas cañas con tapas de salmorejo y sol, y dejarse amodorrar por el sol navideño a orillas del mediterráneo.
Pero el fin del mundo, displicente, se entretuvo en Helsinki vete tú a saber por qué, lo mismo era una cuestión de faldas o intereses bancarios.
Nosotros seguimos a lo nuestro, hielo y alcohol incluido, alguna galleta para mantener el tipo, y empezamos a hablar de series de televisión, de lo guapa que había sido Carmen, de si estaba infravalorado el zumo de mandarina.
Ahora sí, una vez que llegó, el fin del mundo se hizo notar y aquello fue el acabose.

123) Porque al igual que una piedrecita mal incrustada en las vetas de los neumáticos de un autobús Granada-Madrid puede provocar un desastre a la altura de Bailén, el Himalaya, esa montaña puesta ahí por nadie sabe quién para quién sabe qué, rozó de mala manera con el asfalto nebuloso del sistema solar provocando flatulencias con olor a lava, un pinchazo de proporciones tan cósmicas que despeinaron a los habitantes de Urano, con sus pelos de acelga.

124) Porque llevamos ya, desde ese fatídico diciembre del año pasado, sin tener noticias de Matilda, mi vecina del quinto.

125) Porque Manolo Carrasco Díaz fue a Correos, dispuesto como todos los años a mandar sus christmas dibujados a mano y que de tanta emoción llenaban las casas de amigos, familia y Falete. Su intención era mandarlos, pero tropezó con un poliedro de Egipto que se había hecho carne en la Calle Segovia a la altura del H&M. Y el de los christmas se partió la crisma.

126) Porque Hchelmetz Pérez, un maya de ojos profundos y voz triste, lleva escarbando y bebiendo Tang desde que su primo pronosticó lo del fin del mundo hace ya siglos y siglos.
Con huesos y un pequeño escarbador, lo que es a mí se me ha colado entre las entrañas. Y no se va.

viernes, 19 de abril de 2013

miércoles, 17 de abril de 2013

Para conseguir tus sueños


Pero no te olvides
al despertar
recordarlos como te dé
la gana.

martes, 16 de abril de 2013

Pájaros CXLII






Los huracanes
se llevan
las raíces sin lluvia.
Todo lo demás
será cielo abierto.

Facebook cambia



lunes, 15 de abril de 2013

Viaje a Japón IV










Cuando la cabeza empieza a volar en busca del próximo destino (ese maravilloso momento donde todo el mundo está a tus pies y que tanto me gusta prolongar) no es malo tampoco bucear entre carpetas para viajar de nuevo sin moverte de casa.

Una de las maravillas de viajar es que se convierte en una experiencia que permanece para siempre.
Ya sea a través de las fotografías, ya sea por los recuerdos, por los aromas o incluso a través de películas o noticias de la televisión.
Los sentimientos vividos en un viaje se enganchan al subconsciente y saltan a la piel catapultados por los más diversos y fantásticos vericuetos.

Por eso cuando en esta mañana primaveral uno abre la caja de Pandora que florece en las carpetas del último viaje a Japón, aparecen los mercados, los gestos, los bailes, las sonrisas, los caminos, los rezos y las pausas que estaban dormidas.
Y nos despertamos juntos.

domingo, 14 de abril de 2013

Mañana empiezo CLXVII




El 29 de enero de 2009 publiqué, con apenas dieciséis tiras dibujadas, la primera de esa serie que llamé "Mañana empiezo".
Previsor y ordenado como soy, la guardé en una carpeta a tal efecto y, para no complicarme, la llamé 001, por aquello de que el ordenador se vuelve un poco loco para clasificar como se debe archivos con el nombre 1, 10 o 184, de tal manera que si los clasificas como 001, 010 y 184 no tienes problemas.
Hasta ahora, claro.

Quién me lo iba a decir.
Hoy, 14 de abril de 2013, he llegado al número 1000. Y con placer dejo entrar el desorden en mi vida.
Sé que estas tiras seguirán creciendo, aunque me pidan de vez en cuando un respiro.
Mañana miraré de nuevo esa semana que empieza.Y yo lo haré con ella.
No llegaré a renombrar mi vida con cinco cifras, pero en los próximos carnavales me disfrazaré de hormiga.

República sí, dos veces


Y es fácil sumar:
Educación Pública + Sanidad Pública = RePública.

365 irrefutables razones que nos llevan a pensar que los mayas tenían razón y el fin del mundo llegó el 21/12/12 (XVII)


113) Porque Finn, el protagonista de "Hora de aventuras", vive en la tierra de Ooo con Jake, su perro absurdo y mágico. En el episodio "Sons of Mars", emitido el 21 de diciembre de 2012, Finn y Jack son teletransportados a Marte y logran ver la Tierra, desolada tras la gran guerra de los champiñones. 
Podemos decir pues que el amigo Finn, ciudadano del mundo, llegó a la Tierra, pero como con las prisas por hacer boom boom sobre una hoja grande no se había atado los cordones de los zapatos, la teletrasportación hizo que perdiera una ene del final, así que lo que llegó en realidad fue el Fin.
El fin y un perro.

114) Porque el mundo era nuestro mundo. Tu mundo y mi mundo.

115) Porque los discos duros cada vez son más finos y tienen más capacidad. 
Tanaka Matsumo era un ciborg andrógino que había nacido con tres brazos y gustaba de tomar un té mientras escribía mails y acariciaba a su gato Nara. Tanaka inventó, en diciembre del año pasado, un disco duro tan fino tan fino tan fino, que no cabía la definición, que se tuvo que quedar en fin. Y ese disco duro de ciento dieciséis Teras, con la palabra FIN serigrafiada en su canto, provocó un cataclismo que gracias al USB 3.0 llegó incluso antes de lo previsto.
Porque el Tera, como su propio nombre indica, era ya pasado.

116) Porque aunque no lo quisiéramos, las predicciones mayas llegaron poco a poco, con señales inequívocas de desgaste, tristeza y oprobio en forma de decepciones clásicas de nuestra vida: a) los tomates que no sabían a tomates, b) la princesa Letizia, c) el pantalón de piquillo, d) esas telas étnicas tan bonitas que destiñen en la lavadora, d) The Newsroom, e) la depuradora de Nerja, f) el fin del mundo sin chicha ni limoná.

117) Porque Marion Luz Smith, que había recorrido Atlanta con sus padres y su caravana cuando era joven, y tras despedirse de su trabajo como recepcionista en un Day Inn, se echó a andar descalza, calle abajo, con la intención de no parar nunca, a la bonita edad de treinta y un años.
Tras nueve si detenerse ni para dormir, estando como estaba a las afueras de Vancouver, se dio cuenta que llevaba un billete de 100 dólares y nada suelto para poder coger un autobús de vuelta.
Por no hacerle el feo al conductor, ella que sabe lo que les molesta ver un billete grande, decidió darse la vuelta y regresar -ya era hora- por donde había venido.
Tras ocho años de regreso (era cuesta abajo) acabó unas navidades insulsas de 2012 y con cuarenta y ochos años entre sus uñas, trabajando en un Day Out.

118) Porque para hacerse una foto, Venus, tan coqueta como siempre, le pidió a Mercurio que sacase su iPhone para encuadrar en formato cuadrado y aplicarle algún filtro Instagram, con lo bonito que queda.
Mercurio, que tenía la temperatura por las nubes y no sabía de perspectiva antropométrica, le pidió a Marte que se echase un poco más a la derecha, y a la Tierra que se juntase más para la izquierda, sin percatarse que allí había un vórtice temporal, provocado por un agujero gris marengo que se había enfadado con una supernova.
Y es que ya lo dijo Alfonso Guerra. El que se mueva, a tomar por culo.

119) Porque llamaron a la puerta, telefonearon, gritaron a pleno pulmón, escribieron nubes de humo, mandaron folios amarillos con acuse de recibo. Todo contra la desidia del mundo, esa desidia monumental generada por los televisores y la sopa de sobre, pero no hubo manera.
El mundo estaba encerrado en casa y no quería salir.
El mundo estaba de vuelta de todo.
Al mundo le gritaron vuelve pero él dijo que no.
El mundo dijo: a mí fin.

sábado, 13 de abril de 2013

Trazos migados en tableta






Recuperando el sábado festivo de desayuno lento, sol en las legañas y almuerzo de trazos migados en tableta.
Recuperando la capacidad de reconstruir sobre el negro con hojas que se enroscan.
Recuperando las ganas, las ganas, las ganas.

Debe ser la primavera que se ha colado, en forma de pez triple y pies que corren tras un sofá con forma de mar.
Abramos pues la ventana de color y ducha a los pájaros del azahar recién cortado.

viernes, 12 de abril de 2013

jueves, 11 de abril de 2013

El poder de la teletransportación


Aunque preferiría tener el poder propio
y no el ajeno que,
aunque disimule,
todavía tengo pudor.

miércoles, 10 de abril de 2013