Recuperando el sábado festivo de desayuno lento, sol en las legañas y almuerzo de trazos migados en tableta.
Recuperando la capacidad de reconstruir sobre el negro con hojas que se enroscan.
Recuperando las ganas, las ganas, las ganas.
Debe ser la primavera que se ha colado, en forma de pez triple y pies que corren tras un sofá con forma de mar.
Abramos pues la ventana de color y ducha a los pájaros del azahar recién cortado.