Entre la televisión y el balompié pasa la vida de nuestro coche.
¡Pero en ese ínterin hay tantas cosas...!
Hay cometas que se levantan al cielo y le hacen volteretas a la vida. Hay monocoches que igual son marginados que queridos, hay jaulas que son excusas para la aparición del hada madrina, y sigue estando ese mar que se extiende para que las definiciones no falten.
Debe ser por eso que el coche a vapor sigue ahí, entre martillazos y abandonos, y sigue descubriendo el mundo en cada viñeta, para de esa manera tan sencilla mostrárnoslo a nosotros.
Y las definiciones no paran, porque su mundo es infinito...