sábado, 27 de marzo de 2010

365 irrefutables razones que nos llevan a pensar que el mundo no es redondo sino plano XXXI





211) Porque la gran mayoría de los hombres (y me atrevería a decir que también de las mujeres) si tenemos que decidirnos entre un vaquero o un miriñaque, en general lo tenemos bastante claro.
Hasta la pana o el tergal ganarán siempre a unos pantalones bombachos...

212) Porque en los Emiratos Árabes ya se trató, en una conferencia realizada en 1956, la remota posibilidad de que el petróleo viniese del centro de la Tierra, y de todos es recordada la ponencia de Hammed Al Falah, dondé explicó con todo lujo de detalles que si así fuese el petróleo, con el calor del centro de la Tierra, hubiera ardido ya, y ellos no estarían bañándose en los petrodólares provenientes de un mundo plano.
Y dicho eso se encendió un puro con un billete de 100 dólares, el muy tunante.

213) Porque hasta los libros troquelados más hermosos duermen planos en las bibliotecas el sueño de los justos...

214) Porque solo en los momentos en que la liviana juventud nubla nuestra razón y nuestros actos, somos capaces de guardar las camisetas que nos quitamos para dormir hechas un gurruño.
Cuando encauzamos nuestra vida en el placentero camino que nos da la sabiduría de la madurez, las doblamos encima de la cama, aplanándolas como Dios manda.

215) Piénsalo Lentamente Antes, Necio Obsoleto.

216) Porque si en la vendimia los que aplastan la uva trabajan apenas seis horas al día y convierten a ésta en vino, calculad cuántos siglos de historia, cuántos hombres y mujeres sobre la faz de la Tierra, cuantas pisadas sobre campos, montes y caminos.
Como para que no esté plano y prieto...

217) Porque mi ídolo es Usain Bolt.
Usain también es el ídolo de todos los niños.
Así que no tendréis tan mala baba de quitar la ilusión que se refleja magnánima en la mirada de todos los niños del planeta...
Pensadlo: Si el mundo fuese redondo, a Usain Bolt le costaría un poco más los primeros 50 m., pero no tendría nada de gracia la carrera de 100 en los útimos cincuenta, porque entonces sería todo cuesta abajo y así corre hasta mi prima.