El juego de ver quién aguanta más podría haber durado estas cinco tiras, o todas las del mes, soy consciente, pero sea por el cansancio, la edad o el calor, me noto de a últimas más benévolo con el lector, mira tú que cosas.
Y mientras eso pasa, el coche sigue a su ritmo, persiguiendo lo inevitable, mirando a su manera, convirtiendo el triple en tiple y dejando que el paraguas, la acampada y la escampada hagan de las suyas.
A ver quién aguanta más la próxima.