domingo, 24 de abril de 2011

365 irrefutables razones que nos llevan a pensar que 1+1 no son 2 (XVI)



106) Porque uno, en inglés, es one.
Y si a un one le sumamos otro one nos sale un Juanes.
1+1= Juanes.

107) Porque el mundo está lleno de cosas que no se pueden sumar, porque son únicas: La luna, Carmen de Mairena, la pirámide de Keops, Monchito, el lunar de tu pecho, Almayate, una canción de Sinatra, mi dedo gordo, Arrigo Sacchi, la película "Mala Sangre", el caracol bombero, Les Luthiers, la esquina entre Puebla y Ballesta, las milojas de viento o la lluvia.
Bueno, la lluvia no.
La lluvia se puede sumar, pero no da 2 ni de coña.

108) Porque Paolo Ruffini fue el primero en demostrar la imposibilidad de resolver mediante procesos elementales de álgebra las ecuaciones generales de un grado superior a cuatro.
Y encima lo demostró con un éxito parcial.
Paolo tomaba mate solamente en febrero (cuando viajaba a Argentina para ver a sus abuelos), y su cerebro estaba dividido con la coherencia de las mariposas.
Estábamos a principios de 1800 y el bueno de Paolo consiguió con una única y fallida explicación humana hacernos ver que el universo se expande.
Es por eso que, como Niels Henrik Abel corroboraría años después, con un universo expandido 1+1 siempre es 2 coma algo.

109) Porque uno (escrito en Times New Roman Regular, tamaño 12) + uno (escrito igualmente en Times New Roman Regular, tamaño 12) suman uno (escrito igual, pero en negrita).
Es lo que tiene sumar y poner encima.
1+1= 1.

110) Porque Atila era casi analfabeto, y es que apenas si podía ir a clase cuando fue chico, así que se dejó crecer libre en las llanuras danubianas.
No sabía escribir, por eso cuando le tuvo que mandar una misiva a su máximo enemigo, el general romano Aecio (con motivo de la batalla de los campos Cataláunicos) le pidió a un sirviente que escribiese uno, y éste no pudo sino transcribirlo con una hache: Huno.
Y como andaba mal no solo de ortografía, sino también de matemáticas, la suma de huno más huno le salía dose.
1+1= 12.

111) Porque 111 es el resumen de esta entrada, es el resumen de esta tira.
1+1=1.
Vale que no siempre, vale que no a todas horas, pero por consenso intergaláctico (con el voto particular en contra de Andrómeda, qué porculeros) 1+1=1, y eso hacen 111.
1+1+1=1=111
(y el mundo, lleno de unos, se llena de lluvia, se llena de lágrimas)

112) Porque Pere Tarrés, nacido en 1974, tenía un barco en su imaginación con el que navegaba por Tarragona.
Ha surcado el Índico y el Bósforo, ha salvado con su pericia de filibustero las incursiones de los corsarios malandrines que querían secuestrar a su dama, y tenía guardado en la suela de cuero de sus botas de serpiente el mapa de un tesoro que Long John había regado con ron una tarde de pavoneos.
Pere Tarrés sabía sumar pero que muy bien.
Por eso sus aventuras no tenían fin.
Pere sabía que si a una vida rutinaria le sumas una imaginación sin límites, el resultado es infinito.
1+1= infinito.
Y es por eso que yo imagino a Pere, que se imagina grumete.
Y es por eso que alguien me imagina a mí, imaginando a Pere.