jueves, 4 de febrero de 2010

Las definiciones de un coche a vapor I











Así empezó todo...o casi.

Y lo peor es que me acuerdo.
Octubre de 1987.
En aquella época simultaneaba 2º de Bellas Artes con 1º de Filosofía, y en una clase de sociología (al lado de mi amiga Carmen) hice unos monigotes.
Lo sé porque todavía conservo aquella hoja, veintitrés años después.

Recuerdo también haber usado esas formas en un cuadro, y cómo un profesor de entonces me dijo: "Parece un coche".
También conservo aquel cuadro.

Así empezó todo.
Así nació el coche a vapor, así nació su mundo y su manera de definir la vida.
Así aparecieron la tiras cómicas en mi vida, y un personaje que dio paso a los pájaros, al coche de bomberos, al caracol bombero, a la mano bombera y a otros tantos.

Esta tira cómica se convirtió en cortometraje allá por el año 96. Ya os he mostrado parte de ese material, que solo refleja de manera sucinta la cantidad de definiciones que fueron surgiendo en aquella época.

Había dicho no hace mucho que apenas quedaban huecos en mis cajones, pero me equivocaba. Cosas de haber vivido en cuatro ciudades distintas, que los rincones se multiplican.

Aquí están ahora, encima de mi mesa, la totalidad de las tiras cómicas de "El coche a vapor", guardadas en una preciosa caja que me hicieron a medida en "Papela".

Las iremos mostrando poco a poco.
Sin prisa, claro.