miércoles, 17 de febrero de 2010

Las definiciones de un coche a vapor III











Hay un poco de todo, como en botica.
Las definiciones no han hecho sino empezar, y ya se cuelan por aquí la indecisión, la timidez, la desilusión o el otoño.
Todo muy así.

En "El coche a vapor" intentaba usar los recursos mínimos para definir lo máximo.
Sin pasarse, claro.
O para dejar la ventana abierta al espectador, que para el caso es lo mismo. 
Con tres viñetas basta para definir cualquier cosa. 
Cualquiera.

Hasta un bostezo, el aguamarina o un pinchito moruno. Todo es definible.
Principio, nudo y desenlace.

Y ya.