Hay que darle la vuelta al mundo...
El domingo tiene ese algo de rizo donde fin y comienzo se tocan y se confunden.
Las manos quieren dibujar, quieren siesta, quieren zumo. En esto último no hay quien les gane, y a su lado todo vibra.
Tuve ganas de hacer una tira, pero nunca pensé que necesitase tan poco.
Tuve ganas de hacer un blog, pero sin pasarme.
La inactividad es lo que tiene.